sábado, julio 30, 2005

después de la tormenta....

los altibajos de estos días, me han hecho considerar el hecho de alejarme de las letras nuevamente, pero las circunstancias parecieran traerme de regreso a este sitio que se ha convertido en mi refugio, un lugar que al no estar asociado a ninguna nacionalidad ni geografía, me hace pensar que el mundo no es tan grande, ni estamos tan lejos.
de los visitantes pasajeros que han dejado sus huellas por aquí, he aprendido lecciones inesperadas…
ver al que un vez dijo “que el amor no existía”, ahora enamorado, me cuelga una sonrisa en el rostro y porque no decirlo, un poco de esperanza, de que por mucho que se le huya el amor, tarde o temprano te atrapará (bien por ti amigo y por tu niña).
la inquietud de otro amigo por ponerle un punto final a una historia cerrada con puntos suspensivos, me ha hecho reflexionar sobre las puertas abiertas que he dejado en mi camino, y que finalmente, por mucho que me duela, es momento de comenzar a cerrar y seguir adelante.
la toma de conciencia de un navegante, sobre lo que somos capaces de lograr cuando tomamos el timón de nuestras vidas, llegaron una noche en que sola en mi cuarto, me moría de miedo al emprender un nuevo proyecto, ahora me río por la casualidad o por mi buena fortuna, según lo queramos ver.
saber que no somos los únicos que nos sentimos perdidos, hace pensar que tal vez lo que buscamos valga la pena el camino, que la sensibilidad no es señal de inmadurez sino de valentía, el valor de enfrentar lo que sentimos en lugar de ocultarlo, solo evidencia que somos humanos, así de simple.
que aunque no sea el momento, ni el lugar, ni la persona, el amor tiene más matices de los que conocemos, incluso para una atea como yo.

gracias a todos por las huellas dejadas en este camino de arena....les quiero